
Una nueva serie sobre espías con el toque justo de comedia llega a la pantalla de Warner Channel. Protagonizada por Scott Foley (Scandal, The Unit y Felicity) y Lauren Cohan (The Walking Dead, Supernatural y Vampire Dairies), Whiskey Cavalier reúne todos los condimentos necesarios para volverse fan.
Los agentes Will Chase y “Frankie” Trowbridge, del FBI y de la CIA respectivamente, son una pareja dispareja, en más de un sentido, que serán forzados a trabajar juntos a partir de en un caso que une a ambas agencias internacionales, encabezando a un equipo interdisciplinario de profesionales, que deberán superar obstáculos para salvar al mundo mientras encuentran la manera de trabajar en equipo entre la amistad, el romance y la burocracia de la oficina.
Desactivar una bomba nuclear en un transporte público, desenmascarar a un agente encubierto o recuperar artículos de un valor incalculable son algunos de los casos que deberán resolver Whiskey Cavalier y Fiery Tribune. Todo esto, con las ciudades de Praga, Londres y Paris como escenarios, que transforman a la serie en un combo ideal para que los espectadores se enamoren de la dupla de protagonistas y de los paisajes.
Will Chase es uno de los mejores agentes que tiene el FBI, expiloto de helicóptero de la Marina, estudiante universitario de poesía y su nombre en clave es Whiskey Cavalier. Su lado rudo y militar se fusiona con su costado sensible y perceptivo. Luego de una ruptura amorosa, su jefe le asignará un caso en París para despejar su mente y volver al trabajo.
“Frankie” tiene problemas para establecer lazos personales, un pasado oculto y un dominio letal de las artes marciales. Es una espía de la CIA y tiene el mayor récord de capturas.