Trey: «Antes que ser artista, hay que ser buena persona»

A pesar de lo que muchos detractores del género urbano auguraban un par de años atrás; de que sería efímero y olvidado, ha ocurrido todo lo contrario. El reggaetón ha evolucionado; y cada vez más, sus exponentes han sido parte de carteles de festivales como Coachella, tal es el caso de Bad Bunny o J Balvin. Por lo que podemos decir que el género está gozando de buena vida.

En nuestro país, el género es consumido y el producto nacional está creciendo con propuestas nuevas e interesantes. Una de las propuestas que apuesta por algo diferente es la de Trey.

A pesar de que pareciera ser un valor nuevo en el juego, Trey ya tiene una parte del camino recorrido. Conocido anteriormente como Erick con más Flow, la evolución musical de Trey, es un reflejo relativo de la evolución personal.

Recientemente ha lanzado Low, un EP de cuatro cortes, con DC como productor. Con un concepto cósmico y con un arte inspirado en el mítico Astroboy, el sonido de esta producción apuesta por bajos densos y versatilidad rítmica que van desde el dembow, pasando por el reggaetón y el trap.

Me encuentro con Trey en Casa Mala Fama, barbería que ha apostado por la difusión musical a través del showcase de Vicios y Virtudes. Es domingo por la tarde y el sol comienza a desaparecer. Sentados en una banca, preparo los instrumentos para comenzar la charla.

Low es un trabajo completamente original y propio. Ha sido un conjunto de trabajo, una concentración de todo lo que hemos trabajado musicalmente, de lo que realmente llevamos dentro. Creo que si alguien llega a entender mi música, se llevará muchas sorpresas (…) Mi música hasta cierto punto lo considero un estudio y una tesis personal sobre cada situación en la vida, sobre cosas verídicas (… ) es como cuando sacas una foto con los ojos y lo guardas en el recuerdo, en el corazón.

Pareciera que Low es una odisea de una especie de chico espacial que se la pasa viajando por el cosmos. Al preguntarle el porqué del nombre del disco, Trey recordó sobre un trabajo anterior llamado Método, después me explicó que Low es porque por el momento no hay “nada”, lo que sería una especie de comienzo.

Como persona, yo me siento muy contento y tranquilo; sé a dónde voy a ir y sé que voy a llegar. Hace unos días pensaba en todo lo que he hecho para estar aquí; el tiempo que ha pasado; con quiénes me he relacionado; como nos ha ido juntando el destino.

Me comentó que le gustaría que la gente que escuche el disco que lo disfruten y lo conserven, con ello él se sentirá satisfecho. También destacó que hay mucha buena música en el mundo, sin embargo, no ha llegado a los oídos correctos.

Al cuestionarle sobre las necesidades del reggaetón para poder ser una escena destacable y redituable, me respondió que actualmente muchos proyectos están comenzando a trabajar en conjunto para lograr mejores resultados.

Antes de ser un buen artista, deberás ser una buena persona. Siento que a veces nos hace falta ser mejores personas para podernos dar la mano como artistas. Hoy en día, nos estamos juntando varios artistas del underground como Meek Torrez, Cali Budz, Alx One, Ganeela, Malik, J Rivas. Fariaz. Tenemos un movimiento donde tratamos de sacar la escena para demostrar nuestro talento. Es lo que hay (…) Es importante tener los pies en la tierra, tener perfil bajo, aunque también es bueno el ego, sobretodo en esos días en los que te sientes de la verga y de pronto te pones a frontear y te enfocas en resolver tus problemas.

El proceso creativo de Trey suele ser muy variado, las situaciones son las que le imponen el ritmo de la composición, ya que no es lo mismo el escribir una canción a un verso para una colaboración, sin embargo, le gusta tomarse el tiempo necesario para escribir acompañado del humo.

Hay algunas canciones que tienen contenido, mientras otras solamente es flow, métrica y técnica.

A diferencia de ser “Erick con más Flow”, Trey siente que el anterior AKA no era completamente suyo, sino un personaje construido a base de su personalidad.

Con las cartas echadas sobre la mesa, el entrevistado invitó al escucha a fumarse un toque y a disfrutar más que de su música, que disfrute la vida que vea un poco más allá, pues no todo es cuadrado. Además, recordó como su pasión por la música comenzó siendo un hobby para convertirse en su trabajo 24/7.

También habló sobre que la música no debe de ser completamente un negocio, sino también debe de existir el amor por ésta.

Low tiene demasiada obscuridad, es algo real. Es un contenido explícito, tiene un mix de todo un poco (…) “Devorarte” es un tema con respecto a mi vida, todos en el amor salimos lastimados. Todo se está inclinando hacía lo que se sienten (…) Todos pasamos por situaciones.

Una de las razones por las cuales los detractores del reggaetón o el género urbano en general son las líricas que suelen ser sexualmente explícitas, siendo identificadas como letras machistas y misóginas. Por lo que decidí abordar este tema ya que el primer single de Low es “Devorarte”, una canción con un beat retumbante con un bajo denso que cala hondo, contando una historia que se entreteje con situaciones vividas por su autor.

Yo siempre he tratado de cubrir los puntos. Me gusta trabajar en equipo (—) en mi género, quiero cubrir esos puntos en que la gente casi no habla, no escucha. Yo prefiero llegar por otro lado, prefiero ser diferentes, ya hay muchos que copian (…) Todo lo que trato de hacer, viene desde el fondo de mi corazón, proviene de hechos reales. Yo no trato de hacerle creer a la gente alguien que no soy (…) Trato de moderarme en mis líricas para que sean digeribles-.

A pesar de que el sonido de Low es obscuro, la versatilidad que posee Trey a la hora de clavar las barras en el beat hacen que las canciones sean escaladas con cambios de beats y cambios de flow. Otra de las cosas que mencionó, fue el hecho de que la etiqueta de “reggaetoneros” no cubre completamente lo que hay detrás de una producción va orientado hacía algo más artístico.

Aunque no expresó disgusto alguno por la etiqueta. Por lo que todo quedó reducido a un:

No soy nada, soy todo.

Por lo que auguró esta misma entrevista en dos años, pero en Europa en una terraza de algún lugar, con buenas flores y buena comida.

Ya veremos de aquí a dos años…