Caifanes celebra su 30 aniversario en una emotiva noche llena de alegría, baile y el rock de una de las bandas las grandes en la escena latinoamericana.
Como ya se esperaba y se suponía, el coloso de Reforma, lució pletórico para la presentación de uno de los gigantes del rock nacional como son Los Caifanes, con personas de todas las edades, el Auditorio Nacional gozó de dos horas de los clásicos temas de Caifanes, complementando el show con distintas canciones que se eligieron los fans en las redes sociales de la banda.
Durante todo el concierto, la agrupación no paró de elogiar a los fanáticos de la banda, agradeciendo al público en distintas ocasiones dejando en claro que se debían a su público, aparte de manejar un discurso muy patriota a lo largo del show, manejando un mensaje políticos y sociales, como ya ha sido una constante para la banda a lo largo de éstos 30 años.
Con el público eufórico y entregado a sus ídolos, el evento consiguió el clímax con el paso de los minutos y de los éxitos tocados por la banda, llegando a su punto más álgido después de que al terminar de tocar su tema «Aquí no es así» se despidieron de su público, dejando al respetable con ganas de más y sobre todo con ganas de escuchar sus canciones más características.
Después de unos minutos en los que el público no paraba de exigir más del show, los encabezados por Saúl Hernandez, saltaron de nuevo al escenario para entonar los himnos de la banda, «Quisiera ser alcohol», «No dejes que», «La célula que explota» y «La negra Tomasa» que fueron los tres temas con los que Los Caifanes despedirían a su público capitalino y con los que se consagrarían en una noche digna del recuerdo.
Ph Lulú Urdapilleta
