El Estado de México vivió la primera edición del Festival SKApate, en las míticas instalaciones de la Arena «Adolfo López Mateos», en el municipio de Tlalnepantla de Baz, con un gran cartel, que desde hace meses anunciaba un gran reencuentro post pandemia para los fans de «hueso colorado» de uno de los géneros más fuertes y enérgicos en la música de nuestro país.
Slam, bailes y cantos con toda la fuerza guardada durante casi dos años, resultado del encierro, fueron protagonistas, efectuados por cada uno de los asistentes al lugar, quienes sin importar, género y edad, se dieron cita desde muy temprano.
«¡Y que viva el ska mexicano!»
Bandas abridoras como Core Wagen, Los Skalones, Gallo Rojo y Raztlan, iniciaron actividades con sus grandes éxitos. El turno siguió para la Sonora Skandalera, quienes lograron encender un poco más los ánimos, gracias a su interacción con los asistentes y su música.
La leyenda Royal Club, subió al escenario para demostrar porque siguen estando vigentes, a pesar de no tener música nueva, durante estos últimos años. La energía, alegría y complicidad de Chino y su Gala, mostraron un poco de su sus temas, además de cantar alguno que otro éxito de sus antiguas agrupaciones de las cuales formó parte.
Mención aparte, merecen los asistentes al festival, quienes a pesar de ser nuevas generaciones, siguen resistiendo como en los viejos tiempos. Mujeres y hombres de diferentes edades, organizando círculos de paz, sin duda formaron parte del color de este festival que sin duda, fue un gran respiro después del tiempo de encierro, post covid, si es que se les puede llamar post en estos momentos.
El turno de Nana Pancha, y el headliner Sekta Core, trajo consigo un cúmulo de sentimientos por parte de los asistentes quienes, una vez más demostraron, que con organización y responsabilidad, poco a poco pueden seguir abriendo los recintos para que la música vuelva a sonar, o al menos podamos gritar al mundo «¡Seguimos Vivos, Viva el Ska!».