División Minúscula cierra la gira «Fronteras» con un lleno total en el Teatro Metropólitan

Parece ser una noche perfecta para cerrar ciclos importantes de nuestras vidas, el año y la década están a punto de terminar, es un gran momento para desprenderse del pasado y ver con optimismo hacia adelante, tal vez esta solo sea la impresión de uno de los tantos asistentes entre el público pero hay un grupo de personas que comparten esta perspectiva, ellos son División Minúscula quienes cerrarán una faceta en su carrera en las inmediaciones del Teatro Metropólitan de la CDMX.
El periodo del que estamos hablando es la gira «Fronteras», un episodio que duró casi dos años dónde visitaron muchas ciudades de la República Mexicana para promocionar su primer disco grabado totalmente en vivo, mismo que inició con una íntima presentación en el Centro Cultural Roberto Cantoral los primeros meses del 2018.
Esta serie de conciertos constó de presentaciones acústicas dónde todos sus seguidores tuvieron la oportunidad de revivir la experiencia y disfrutar un espectáculo distinto al que acostumbran.

La ciudad y las afueras del teatro lucían un tanto apacibles, algo extraño para un fin de semana justo a la mitad del mes de diciembre, fechas que se caracterizan por despertar el caos interno de nuestra capital. Un viernes 13 y el clima cambiante no detendrían a todas las personas que esperaban con ansias un concierto de su banda favorita. El desfile de playeras y sudaderas era imparable, a pesar del sold out anunciado un par de días antes, el ingreso al lugar transcurrió en orden, pareciera que todo aquel asistente quería ocupar su lugar lo más pronto posible para no perder detalle alguno.
Salvador y el Unicornio inaugura la velada
Debido a la carencia de los horarios oficiales para el espectáculo de esta noche, el Teatro Metropólitan lucía grandes espacios vacíos en sus butacas pero la acción en el escenario ya había comenzado minutos antes de las 20:00 pm con un pequeño show del artista invitado Salvador y el Unicornio quién armado con una única guitarra al ritmo del folk se encargó de musicalizar los momentos previos al inicio del platillo estelar de la noche con algunos de sus éxitos como “Carolina”, “Agua de Coco”, “Caminando” y “Calma” a dueto con la bella Silver Rose. Aunque no todos tuvimos la dicha de presenciar su set completo, nunca es mal momento para recordarles lo importante que es llegar a tiempo a cada concierto para apoyar a los talentos en ascenso.

Conforme transcurrían los minutos, el recinto comenzaba a llenarse, el ambiente estaba preparado para recibir con alaridos y gritos de emoción a la banda tamaulipeca. Minutos antes de las nueve saltarían al escenario, arrancando una ovación en todo el lugar, al ritmo de «Un Beso Al Aire Un Tiro Al Pecho» tal como en el material discográfico, el inicio del fin daba arranque. Un agradecimiento sincero acompañado por temas como “Cada Martes”, “Humanos Como Tú” y “Frenesí”.
De nueva cuenta Javi Blake tomó la palabra pero recordarle a los asistentes que el show de esta noche era especial y todo lo que estaban por escuchar eran canciones que le pertenecen a cada uno solo con reinterpretadas para adecuarse a la ocasión, así “Juego” y “Casa de Cristal” en compañía de Jair Alcalá y su acordeón. Acto seguido, una expresión de amor recíproca del capitán Javi con su público, tras esta muestra de afecto comenzó a sonar «Maquillaje» y “Altamar” seguido de un brindis por todos aquellos que estuvieron presentes este año y un brindis extra para que el 2020 sea aún mejor que éste.

Y yo sigo esperando el año nuevo…
Cuando no dimensionas el tiempo es porque has disfrutado cada segundo que ha pasado, esa frase describe los más de 20 años de trayectoria de la agrupación por esa razón era momento de escuchar un tema con casi la misma edad que la propia banda: “Cursi”. Un ensamble de cuerdas entraría al escenario para acompañar a la banda en un trío de canciones que marcarían el momento nostálgico de la velada, «Préstame Tu Piel», «Sognaré» y «Me Tomé Una Pastilla».
Una dedicatoria a todos los asistentes y a cada miembro de la banda en conjunto con todo el equipo que hace posible División Minúscula, acompañado por un último brindis por noches como esta y en espera a que sean más, «Las Luces de Esta Ciudad” comenzaban a sonar en todo el foro, la presentación de la banda y la interpretación de «Año Nuevo» daban por concluido el ciclo Fronteras, al menos por el momento.
Después de una breve pausa donde el grito unísono que mezclaba voces pidiendo una canción más y otro sector que gritaba a todo pulmón el nombre de la banda, Javier Blake regresaría al escenario para responder la petición de su público e interpretar una versión acústica de «Sismo«, una canción que aparentemente no estaba planeada pero la presión social fue suficiente para convencer al cantautor, sumado a esto el escenario se engalanaría con la presencia de Don Bravo quien prestaría su talento al acompañar a Javi e interpretar una canción poco recurrente en sus presentaciones, «N-Amigo«.

Que se rompan las fronteras
El ingreso de la banda completa tras este breve parón anunciaba el final definitivo del concierto, con un penoso mensaje por parte del equipo de División donde expresaban su deseo por dejar de tocar este tema pero las condiciones que enfrenta el país actualmente se los impedían, «Sin Nombre» hacía vibrar el recinto. Tras dicha interpretación, la banda decidió tomarse la libertad de cumplirse un capricho y dedicar un tributo a Tom Perry, un artista que define la esencia del grupo a la perfección, finalmente, la manera perfecta para cerrar esta etapa fue despidiéndose de su público al ritmo de “La Última Y Me Voy”, una canción que por primera vez durante toda la velada hizo que el recinto se pusiera de pie y coreara a la par del grupo hasta quedarse sin voz.
De esta manera y después de dos horas sin interrupciones, División Minúscula daba por terminada la presentación final de esta etapa que dejó tantos recuerdos en una familia que se ha vuelto más fuerte durante más de 20 años, una familia que incluye músicos, asistentes de producción y por supuesto toda la gente que ha acompañado fielmente a la banda en todos los caminos que han recorrido.
Oficialmente la gira “Fronteras” había llegado a su fin minutos antes de las 11 de la noche, con un Teatro Metropólitan rendido a los pies de la banda originaria de la Tamaulipas. Cada individuo reunido en el lugar se llevaba una sonrisa de satisfacción tanto por el espectáculo presenciado como por lo que éste representó en la vida de todos. Sin más que decir, es momento de sentarnos a esperar qué sorpresas nos traerá el año nuevo de la mano de División Minúscula.
Ph: Liliana Estrada